jueves, 6 de diciembre de 2012

Y una noche de diciembre...

Esta noche, me apetece desnudarme y ser sincera, en mis 23 años he aprendido y desaprendido, he crecido y he construido las bases que me soportan en mi día a día según mis vivencias y según las personas con las que me he cruzado, algunas de ellas se han ido, otras aún siguen a mi lado y algunas, aún por llegar...
He cambiado de opinión miles de veces, algunas de estas veces incluso en el mismo día, en 60 minutos o incluso menos, porque creerme, soy experta en dar pasos en falso y equivocarme, soy experta en aceptar mis errores y abrazarlos, porque son mios y con ellos crecí, y sigo creciendo y experimentando.

Hacía mucho tiempo que quería escribir algo, algo que colgarme todos los dias en la puerta de mi casa, algo que leer antes de salir cada mañana, algo para recordar las 24 horas del día... y me gustaría compartirlo, por dos motivos, para que cada uno de vosotros coja lo que le sirva, si es que algo os sirve; y porque en la vida, todo es más bonito si se COMPARTE.
Ahi va :)


Quiérete, quiere tu cuerpo sea como sea, estate agradecido por poder respirar, sentir, sonreir, mirar y respeta tu cuerpo, disfrútalo, que nadie te ponga límites, ni si quiera tu mismo, porque los límites los pone tu mente, se sincero con lo que te apetece y disfruta tus gustos sin juzgarlos, por muy "raros" o "diferentes" que parezcan a los de los demás, son tuyos, y seguirlos y respetarlos son la única forma de ser feliz.

Cada mañana no te olvides de mirar al cielo, AGRADECE a la vida, siente el sol en tus mejillas o la lluvia en tu pelo, respira el aire, intenta sacar tiempo cada mañana para sentirte parte del mundo salvaje, y de la vida, todos necesitamos contacto con la naturaleza, no pases demasiado tiempo entre cuatro paredes, dedica aunque sea 10 minutos al día a estar en contacto con el mundo real y natural, sientéte parte del mundo y de sus ciclos. Acepta y respeta tu parte salvaje.

Cuando andes por la calle OBSERVA, no pases demasiado tiempo en tu mundo, ni conectado a los móviles, auriculares, libros... el mundo está más alla de todo eso, observa las expresiones de los demás, las formas de caminar de los extraños, y de vez en cuando sonrieles, llénate de los demás, y se amable con ellos, no sabes como una sonrisa puede cambiar el día a alguien. Ceder el paso, miradas de compatibilidad... Disfruta de la humanidad de las personas, solo podrás verla si tu tambien eres humano, Ábrete a la vida, porque las miradas y la amabilidad de los demás no llegarán a ti si te pones una coraza, se humilde, y accesible.

Acepta las situaciones que te trae la vida, nuestras vidas son un conjuntos de CAMBIOS ligados los unos a los otros, nunca podremos evitar que sucedan, pero sí podremos adaptarnos. No olvides que los CAMBIOS son EVOLUCION. Si una situación cambia drásticamente, acéptala y adáptate. Acepta cada situación que traiga la vida, por injusta que parezca, cada una esconde detrás de ella enseñanzas. El universo es sabio, y paciente.

No juzgues, no critiques. Y esto es dificil. Criticar y juzgar son formas de querer hacerte mas grande y valioso frente a los demás, formas de querer elevar tu autoestima mientras que inferiorizas a los demás. Respeta a los demás, las formas de ser y de pensar. No eres mejor ni peor que nadie. Todos somos uno, y a la vez todos somos diferentes, aprendiendo en los diferentes caminos de la vida.

Cuida a tus amigos, demuestra y expresa tus sentimientos, Aprecia y agradece a los que siempre han estado y estarán, pide perdon si les haces daño, y aunque sea dificil, intenta no perder el contacto con ellos durante demasiado tiempo, aunque sepas que siempre estarán, las personas necesitamos ser cuidadas y queridas.
Acepta a aquellos que sólo se cruzaron contigo para compartir algo y luego se marcharon, y lo más importante, cuando llegue el momento, déjalos ir.

Los caminos se cruzan unos con otros y se entrelazan para volver a separarse. Comparte los caminos de las personas que se cruzan en tu vida, vive e interésate por sus pasiones ¿qué es aquello que les hace sentir vivos? ¿qué les apasiona?  Compártelos pero no los confundas con el tuyo, los pasos de los demás a menudo dejan huella, pero no te pierdas en sus suelas, cada uno tenemos nuestro propio caminar. No confundas los caminos con las enseñanzas.

Respeta el planeta Tierra, que es nuestro hogar, y respeta a sus habitantes. Animales, humanos y plantas, todos somos seres vivos y vivimos en constante equilibrio. Es increible como podemos a llegar a desestabilizar nuestro mundo y lo fácil que se resquebraja poco a poco. Pon tu grano de arena. Haz tus elecciones: hazte vegano o vegetariano, o simplemente hazte consciente de lo que comes y de donde viene, ahorra agua si lo prefieres, recicla, o no compres pieles de animales, o simplemente no tires basura al suelo. Se trata de ser un poco más consciente, valora quien eres y de donde vienes, entiende que todos somos habitantes del mismo planeta, y por tanto es nuestro deber cuidarlo, se trata de poner un grano de arena, haz lo que sientas y lo que creas que esté a tu alcance. Y no dejes de respetar las elecciones de los demás.

Dedícate tiempo para ti, cultiva tu interior, que es el reflejo de tu exterior, MEDITA, siéntete, hazte consciente de quien eres y busca en tu origen, escucha el silencio, deja de analizar, racionar, pensar; tan sólo SIENTE. Habrá veces que te sentirás perdido, Sigue tu intuición, ten fe en ti mismo; Y confia. No desesperes, tu tienes todas tus respuestas, y la mayoría de las veces éstas están delante de tus ojos.

Acepta y quiere a tu familia, ellos son el vínculo entre tu pasado y tu presente, Acepta que todos tenemos errores y todos hacemos daño alguna vez, y desafortunadamente, dañamos más a los más cercanos. Agradece a tu madre y a tu padre, ellos te dieron algo de tan grandeza que tú nunca podrás devolverles, LA VIDA. No esperes que te entiendan , no esperes que sean como tú, no esperes nada, o podrías lastimarte. Quiérelos y acéptalos como son. Si te han hecho daño alguna vez, perdónalos; Y pídeles perdón si alguna vez les heristes. Agradece tu infancia, sea como fuese, tú eres la persona que eres ahora por todo lo que viviste.


Viaja, cuanto más mejor, pero no olvides que al final, los lugares son las personas.
Baila, canta, pinta, exprésate de la forma que más sientas, y nunca digas que no vales para algo, todo está a tu alcance.
Haz el amor, deja a tu alma que se exprese plenamente através de tu cuerpo. Pero intenta ser fiel a lo que sientes y a lo que quieres.

Y Hagas lo que hagas, se LIBRE. La libertad vive dentro de cada uno de nosotros, no permitas que nadie te robe esa esencia, ni siquiera tu mismo.


Cristina.











Todos los derechos reservados.






miércoles, 29 de agosto de 2012

Agosto, el mes congelado.


 
Afortunadamente hay veces que gente se convierte en persona y tiempo en mi vida,  cuando cualquiera de las posibilidades y caminos emprendidos llegan a la misma alma, como si un fuerte lazo de acero nos conectase irremediablemente. Y una mañana de miercoles cualquiera, me sale escribir esto, que es para ti.


Agosto se ha congelado. Eres afortunado. Coge el jersey de punto gris, ese que tanto me gusta ponerme y vuelve a impregnar el olor en el. Me lo he puesto demasiado, lo he ensanchado y casi estropeado, deshilachado, como un trapo sucio en la esquina de mi cuarto tirado. El jersey, digo. 

Y es que agosto se ha congelado. ¿Dónde está nuestro verano, los meses de deshielo? Vamos a quitarnos el bigote de señor mayor, suelta el maletín hecho con piel de elefante elegante y lleno de responsabilidades.  Combatamos el agosto congelado a cañonazos de palomitas de colores! Y no vale ser cascarón de huevo. No esta vez. No en este juego.

En pleno Agosto esquimal. Extraños mirando al cielo y preguntándose si hoy saldrá el Sol. Y Tú ¿por qué no estás hibernando? Tiras de mí para que salga de mi caparazón sin razón y contemple el Agosto infernal. Invítame a un té con leche hirviendo. A mi me gusta como te queda, incluso deshilachado. El jersey, digo.

Agosto se ha transformado. Al igual que nosotros. Todo ha cambiado. Todo está cambiando y yo te agarro fuerte la mano. Tú, que eres el resto de nosotros dos. Tú y yo venceremos el letargo congelado. Y si no me invitas a un té, te invito yo a un café. Siempre y cuando me hagas sitio dentro de tu jersey de lana arrugado. Agarra tú también mi mano, que eres Tú mi Agosto repleto de helados.


Cristina.

sábado, 11 de agosto de 2012

Animal.

Que cuando cae la noche mi cerebro se transforma,  y no existe monstruo más temido, que el que vive bajo mi piel.


Aunque tú, aún no lo sepas.

jueves, 14 de junio de 2012

más O2, por favor.

Que no me quedan ganas, ni alas, ni paciencia, ni fachadas que mostrarte, ni más huesos que regalarte, ni más carne para alimentar a las bestias. Deja de empujarme, de querer manipularme, no tienes fin y no puedo más contigo.

Me retas, me miras agresivo a navajazos, quiero poner mis nervios encima de la mesa, para que te hagan compañia a ti también. Pero te has cogido carta blanca conmigo.

Y entre tanto, me pinto los labios de rojo cereza y vamos a hacer como que no pasa nada.

3, 2, 1... me has dejado sin aire.







Quiero gritar.

sábado, 9 de junio de 2012

#3

Que cuando llega la noche me duele tanto el corazón que no puedo ni respirar, ni siquiera pensar...
Que no se de donde emana tantísimo dolor... pero cuando la luna aparece, se me abre el pecho, y lo contemplo latiendo lento, deshaciendose y manchando mis dedos de un rojo fluorescente......




La culpa desde luego la tienen las películas.

miércoles, 6 de junio de 2012

#2

Me pregunto si alguien más está sintiendo todo lo que se nos viene encima...

Cuando llega la noche me siento triste en muchas ocasiones, otras simplemente me duele el corazón.

Siento algo dentro de mi que quiere salir y aún no ha encontrado el camino, pero busca insaciable la forma de salir al exterior. Me siento creciendo y evolucionando. Mis miedos se hacen diminutos y puedo sentir el Amor Universal irradiándose...

Muchas veces empiezo a hablar y quedo maravillada por las cosas que digo, que no las digo yo, pero salen de mi boca....

viernes, 1 de junio de 2012

# 1

Y así es como dejó de creer en el amor:

Una mañana de un viernes cualquiera desayunando pan con aceite y té. Mientras le hablaba en inglés, ella perdía la mirada en el jardín, sin duda era el jardín más bonito que había visto nunca.

Se escuchaban miles de pedazos rompiéndose, cayendo de su pecho hacia de la tostada.

Así fue, una mañana cualquiera, él dijo algo que le hizo clip en su sitema nervioso. Se acabó la idea del amor para toda la vida.

jueves, 31 de mayo de 2012

Tú.

Recuerdo los días de verano. La sal pegada a mi piel, sudados, casi derretidos encima de las sábanas.
Mis piernas enredadas en tu torso. Mis labios pegados en tu pecho. Recuerdo los días de verano en los que me dejabas enredarme a ti.

Recuerdo los desayunos y las montañas de colacao. Recuerdo tu pijama gigante de rayas, lo mal que me quedaba y lo mucho que me gustaba ponérmelo. El despertarnos a las diez de la mañana, hacer el amor una y otra vez, que se nos haga de noche. Y gritar...

Recuerdo los días desbordándose sin ti, los billetes de avión. Recuerdo saltar a tus brazos al aterrizar. Pero también los abrazos con velcro antes de despegar y miradas tan profundas que eran capaces de arañar en el alma.

Recuerdo y no quiero olvidar nunca los baños en tu bañera diminuta, con música de Facto de la fe y filosofear sobre el sentido del mundo. Ahora lo pienso y sonrío, cuando nos cronometrábamos los masajes, no me regalabas ni un segundo de más, y te odiaba por ello. Ahora moriría por masajearte de por vida.
Que hueles a leche condensada. Y a vainilla después de hacer el amor.


Recuerdo cuantísimo te he odiado por dolerme, y cuantísimo te quiero.


Que fácil sería si pudiera arrancarte, pero no quiero.





miércoles, 23 de mayo de 2012

Parte 1. El cementerio está lleno de valientes.

Había corrido los riesgos, afrontando espigas con coraza de papel albal y había perdido, y es que ya se lo dijeron hace poco, cuando ella se sentía con fuerza y libre, que el cementerio estaba lleno de valientes.

Absorta en su mundo, escribiendo en su cuarto sin más, como rutinariamente nunca hacía. Se había mudado hace un año y aún no sentía ese lugar como suyo propio. Algunas de sus pertenecias seguían apelotonadas en las maletas, no había querido asentarse, no quería instalarse, se sentía extraña, no encajaba en ningún lugar y por supuesto con ninguna persona. Pero en el fondo ella lo sabía, el problema residía en sus zapatos, en sus plantas de los pies.

No se trataba de ellos, de todos los ellos que habían pasado por sus sábanas, ni se trataba de ellas, con las que los cafés ingleses parecían de película: pastas, chocolate y conversaciones livianas. Demasiados yo, y los intereses hacia el prójimo brillaban por su ausencia.
Todo a su alrededor parecía tener un rítmo lineal, y ella lo seguía a tropezones. No le parecía mal, no le parecía bien, ella sólo lo seguía.
Había días en los que aguantaba la respiración y se concentraba en que llegara la noche y dormir - Un día menos!- Se decía aliviada. Dormir y dormir. Quería despertar a la vida en sueños.
Otros días ella tan sólo se deslizaba. No pensaba, no quería pensar, se sentía molinillo de viento, dejándose llevar por las voraces corrientes en este mundo hostil, y cuando alguna de sus neuronas de cristal viajaba más allá de los límites, ella se engañaba a si misma y le contaba a todas las demás que fluía, que ella sólo se sentía corriente de agua, y que ningún oceano rechaza a un río que corra su curso, y era entonces cuando el resto de las neuronas se miraban complacidas las unas a las otras y seguían el ritmo prescrito, siempre dentro de los límites establecidos.
Pero ella en el fondo lo sabía, que sólo ella podía cambiar el destino de sus pasos hacia la dirección que ansiaba por dentro.
Pero no quería volver a correr riesgos.

Escribía ensimismada, ventanas abiertas de par en par, la Luna Creciente entrando fuerte con la brisa de verano, las velas, el incienso... el ritual estaba causando el efecto buscado, el texto empezaba a tomar forma...
Sin más un grito punzante la hizo saltar de golpe desde sus escritos hasta el mundo real, quedó petrificada.
El grito cada vez se volvía más agudo, más penetrante, era un grito de verdadero dolor, de sufrimiento como nunca habia imaginado que podría existir. No podía diferenciar si era humano o animal, a fuera de su ventana sólo había frondoso bosque inmaculado, se acercó a la ventana con el corazón casi ahogado, le dolía el pecho por tantísimo dolor.  Su cerebro fue apuñalado por miles de imágenes de los posibles orígenes de tal tortura; Y entonces con las manos apoyadas en el marco de la ventana, dolida y aturdida, intentó buscar el grito que seguía emanando desde alguna parte.
Duró unos 3 minutos, casi cuatro, y el dolor atravesaba la línea de la desperación. Poco a poco cesó y quedó apagado sin más bajo los colores pálido-rosáceos de la Luna aquella noche.

Athenea casi había desaparicido en si misma, había quedado plasmada, apoyaba la cabeza al marco de la ventana, los ojos como platos y la cara desencajada, y las lágrimas comenzaban a deslizarse mejilla abajo...

Había viajado en el tiempo, ya no estaba allí en aquella casita acojedora en el Norte de Inglaterra....


Continúa...

Chris.


martes, 1 de mayo de 2012

el día que te escribiría...

No creas que me he olvidado. Me sigues doliendo como el primer día.
Siempre me gustó tu energía y que estuvieras cerca. Ya sabes que para mi eres casi humana.

Y es que a veces me creo que estás cerca, sigo cerrando las puertas y ventanas para evitar que te vayas, sigo manteniendo ese instinto protector aún y cuando ya te has ido. Y escucho ruidos y creo que vienes, cargada de ti, con esa mirada de almendra que transformaba todo, y es que yo te sentía casi humana.
Has estado siempre, hemos crecido juntas, lo has visto todo de mi: mi evolución, mis cambios, mi caos destructivo y mi paz interior, y no se que pensarías; pero espero que lo sintieses. Seguro que sí, que lo sentías... por qué el amor no tiene formas ni banderas... Y cuando se expande alcanza razas, límites, e incluso kilometros... y es por eso que se que me puedes sentir...
Acepto tu decisión... Aunque duela, se que lo hiciste porque ya no te sentías en casa, siento muchísimo no haberte llevado conmigo... pero nunca te he sacado de mis planes...

Siento muchísimo no haberte escrito antes, he obviado el tema, no quiero que me pregunten, incluso he bloquedo mis recuerdos, y cuando emergen los empujo lejos, no puedo permitirme acordarme, dueles demasiado.

Si alguna vez decides volver, estaré esperando...
Estoy segura de que en algún punto del infinito volveremos a encontrarnos... hasta entonces, cuidate muchísimo....

jueves, 8 de marzo de 2012

Vuelve el insomnio y como no, la cafeína.

Ni si quiera me da por pensarlo, un millón de huracanes quieren romperme y yo ni siquiera quiero ser consciente.
Quiero ser eterna. Poder vivirte miles de veces. Pero suelo hacerlo, tejer con rutina los sueños y olvidar que estoy despierta.
Nunca fue fácil, un Universo hecho de retales viejos y de billetes de avión, pájaros en mi cerebro de luna que agarran con fuerza mis raices y las llevan lejos, a palmos de la Tierra. Creando realidades paralelas y llevando la luna siempre por bandera. Suelo hacerlo, cerrar los ojos a lo que no quiero escuchar, y abrir de par en par los corazones si creo que te veo.
Siempre creo que te veo.

Ojala pudiese parar de verte en cada infame resquicio. Suelo hacerlo, creer que eres tú cada vez que me eclipso. La próxima vez tan sólo quiero dejarme estremecer y dejarte ir, aguantar la respiración hasta que te desvanezcas.
O proyectarlo y...
Quizás aparezcas algún día, y te conviertas en realidad cuando yo esté preparada para verte.
Podría conformarme, ser número impar. Pero me encantaría compartirme contigo.

sábado, 18 de febrero de 2012

Liverpool, pool of life.

Esto no es lo que parece. Pero voy a intentarlo...
Bajando por London Road, es esta llovizna que se impregna, cierro los ojos y sigo bajando direccion a Line Street. No puede haber una sensación mejor que esta, ahora sí, definitivamente huele a nuevo.
Por un momento he olvidado mi pasado, de donde vengo y con quién me crucé. Sólo soy ahora, un punto más del Universo deslizándose calle abajo, aurículares envasados en mis oídos y apunto de explotar.
Libertad es lo que siento, un mundo de posibilidades abierto através de mis pupilas, adoro Liverpool, ciudad de Vida.
No se cómo explicarlo, pero esto no es lo que parece.
Sentimientos enredados detonando en un solo suspiro, y cómo voy a arrepentirme, cómo voy a arrepentirme de decidir estar viva, fuera de control, libertad en mis pestañas, que ven lo que querían ver, libertad en mis pies, que están donde querían estar. Estamos.

Despertar obnubilada, casi anestesiada. Dejar de pensar. No tener esa sensación de estar sujeta, amarrada, arrestada. Se había acabado el posponerlo. Respirar ondo y soltar. Coger las riendas. Sonreir desde dentro. Libertad debe ser esto.

Esto no es lo que parece, no es un escrito, sólo lo que siento hoy,  una noche cualquiera desde una ciudad maravillosa...